Desmontando mitos: acepta la rabia para poder pasar a la acción.

Acepta tu rabia para poder pasar a la acción y resolver el desafío.

 

Ira, cólera, furia, irritación, enfado, enojo, molestia, disgusto, desagrado, contrariedad. Todos estos estados expresan rabia aunque en diferentes grados de intensidad 🔥⁠

Hace algunas semanas te hablé sobre cómo trascender el miedo y lo importante que es que prestemos atención a lo que nuestras emociones nos indican.

En este primer post quiero hablarte del reto que supone entender el para qué de la rabia y la relación que tiene con nuestra supervivencia.

Sé lo que estás pensando: “Lourdes, ¿la rabia también tiene un mensaje para mí?” Correcto: la rabia te informa de que una necesidad (física o psicológica) tuya no ha sido cubierta. Señala una carencia.

Pero, además, nos carga de la energía necesaria para ir hacia aquello que queremos conseguir; nos moviliza y nos permite pasar a la acción.

 

LA RABIA COMO EMOCIÓN.

 

• Es una respuesta natural ante una situación de amenaza.
• Se activa ante la frustración: aparece como respuesta a una necesidad no resuelta, a una carencia.
• A diferencia del miedo, nos predispone a atacar y defendernos.
• Viene acompañada de cambios fisiológicos (aumento del ritmo cardíaco) y biológicos (aumento de la adrenalina).

EL ORIGEN DE LA DIFICULTAD QUE TENEMOS PARA EXPRESAR LA RABIA

 

🤬Estar cabread@ tiene muy mala prensa. Incluso nosotros mismos nos enfadamos por estar enfadados. ¿Te has preguntado alguna vez por qué?

Culturalmente, la rabia es una emoción muy censurada, está mal vista. Aprendemos desde niños a reprimir nuestra ira o a limitar su expresión desarrollando mecanismos de negación o represión.

Si hacemos el ejercicio de observar qué emoción hay detrás de una situación que nos frustra, en un primer análisis nos toparemos con la tristeza, la culpa o la vergüenza. Sin embargo, si vamos un paso más allá y probamos a ver qué hay detrás de esa primera emoción, es más que probable que lo que sintamos sea rabia. A esto es a lo que yo llamo en las sesiones “rabia disfrazada”.

Desde pequeños recibimos mensajes del tipo “no te enfades”, “no muestres que estás enfadado o te dejarán de querer”, “si notan que estás enfadado, vas a perder algo importante para ti”. Por lo tanto, aprendemos a expresar este enfado a través de una emoción que socialmente esté más aceptada.

 

PRIMEROS PASOS PARA ACEPTAR LA RABIA

 

Voy a compartir contigo los 3 primeros pasos que puedes dar si quieres empezar a poner foco sobre tu rabia:⁠

⁠1️⃣Nombrar la rabia y legitimarla te puede ayudar a bajar la intensidad de esta emoción.⁠

⁠2️⃣Conectar con esta emoción y entender mejor qué creencias nucleares disparan este mecanismo.⁠

⁠3️⃣Saber cómo canalizar la energía y aprender a expresar el enfado también es clave.⁠

 

 

ALGUNOS TIPS QUE TE PUEDEN AYUDAR A DAR LOS PRIMEROS PASOS SI QUIERES APRENDER A GESTIONAR LA RABIA.

 

✅La próxima vez que sientas enfado prueba a decir “¡estoy enfadad@!”, y observa si algo cambia. Regístralo.

✅Te puede ayudar hacerte esta pregunta: “¿qué me ha enfadado?”, “¿qué necesidad mía no está siendo atendida?”.

✅Salta, grita, sacude los brazos y las piernas como si te fuera la vida en ello. Prueba y encuentra la manera que te ayude a canalizar todo ese exceso de energía.

✅Cultiva la serenidad. Cuando sentimos que nuestras necesidades están cubiertas, nos sentimos en equilibrio, estamos serenos. Focalízate en el aquí y el ahora. Busca una actividad que te conecte con la calma: meditar, respirar, escuchar música, dar un paseo, observar la naturaleza.

Otra gran preocupación en relación a la gestión de la rabia con el que me encuentro en las sesiones es que la persona no puede controlar la intensidad con la que expresa la emoción: aprender a transformar el enfado que destruye en energía que resuelve es todo un desafío.

 

Si este tema te interesa y te gustaría aprender a transformar el enojo en una energía que moviliza, házmelo saber: déjame un comentario o mándame un mail con tu respuesta.

 

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